14/03/2025 - Edición Nº183

Cultura y comunidad

Felix Luna

Félix Luna: Un Legado de Historia Accesible para Todos en Argentina

05/11/2024 | Félix Luna, nacido en 1925, se destacó por su labor como historiador y divulgador. Fundó la revista “Todo es Historia”, escribió libros emblemáticos y letras de canciones memorables.


por Redacción


Félix Luna: El Historiador que Democratizó el Conocimiento

 

El 5 de noviembre de 2009, la Argentina perdió a uno de sus más destacados historiadores, Félix Luna. Nacido en Buenos Aires en 1925, Luna dedicó su vida a desentrañar la historia de su país, haciendo que este saber fuese accesible para todos. No solo escribió múltiples obras que se convirtieron en bestsellers, como “Soy Roca” y “Perón y su tiempo”, sino que también fue pionero en la divulgación histórica a través de la revista “Todo es Historia”, que fundó en 1967 y que todavía se edita. Su legado sigue vivo y vigente en la cultura argentina.

Formado como abogado en la Universidad de Buenos Aires, Luna se involucró en la política desde joven, lo que lo llevó a ser un ferviente militante del radicalismo. Su carrera como historiador comenzó a florecer en un momento crítico para el país, caracterizado por la censura y la represión. Sin embargo, encontró en la historia un medio poderoso para canalizar las inquietudes políticas de la población, convirtiendo su trabajo en una forma de resistencia intelectual. Propagó la historia como herramienta para entender el presente y reflexionar sobre el pasado.

De igual manera, Luna fue un talentoso letrista y colaborador cercano del músico Ariel Ramírez. Juntos compusieron “La Navidad Nuestra”, una obra fundamental que forma parte de la célebre "Misa Criolla". En esta obra, los temas incluyen "La Anunciación", "La Peregrinación", "El Nacimiento", "Los Pastores", "Los Reyes Magos" y "La Huida". Esta colaboración no fue la única; también crearon otras piezas icónicas como “Alfonsina y el mar”, “Antiguo dueño de las flechas”, “Cantata Sudamericana”, “Juana Azurduy” y “Zamba de Usted”.

A lo largo de su vida, Luna no solo se dedicó a la escritura y la investigación, sino que también fue un activo docente y funcionario. Se desempeñó como secretario de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires entre 1986 y 1989 y estuvo vinculado a la educación en diversas universidades. Además, su trabajo en medios de comunicación, en especial en el diario Clarín, le permitió llegar a un público más amplio, promocionando el interés por la historia en un momento en que muchos se encontraban desilusionados.

El impacto de su obra es innegable. Su esfuerzo por popularizar el conocimiento histórico ha dejado una huella imborrable que continúa inspirando a nuevas generaciones de historiadores y escritores. En cada rincón de las librerías argentinas, su obra sigue viva, recordándonos su compromiso por hacer de la historia una narrativa accesible para todos.