¿Cuales son los cambios que llegan a la AFIP después de la motosierra?

Según el gobierno la disolución de la  AFIP es un paso clave en el plan de reformas estructurales. La reestructuración, que busca modernizar y optimizar la recaudación fiscal y el control aduanero en Argentina, también incluye la designación de nuevos directores para las áreas claves de la recaudación y el comercio exterior.

Los dos funcionarios que estarán al frente de estas divisiones son Andrés Edgardo Vázquez, quien liderará la Dirección General Impositiva (DGI), y José Andrés Velis, que tomará las riendas de la Aduana. Ambos reemplazarán a los anteriores directores, Gabriel Ramírez y Eduardo Mallea, respectivamente.

Los nuevos líderes: Vázquez y Velis

Andrés Edgardo Vázquez, con una vasta experiencia de más de 30 años en el ámbito fiscal, será el responsable de la Dirección General Impositiva (DGI) dentro de la nueva ARCA. Licenciado en Administración y Contador Público, Vázquez cuenta con una sólida trayectoria que abarca tanto su formación académica en la Universidad Argentina de la Empresa (UADE), como su participación en importantes seminarios internacionales, incluyendo capacitaciones en los Estados Unidos sobre lavado de dinero y control financiero. Su profundo conocimiento en la fiscalización de grandes contribuyentes y su experiencia en inteligencia fiscal lo posicionan como la persona ideal para liderar la DGI en este nuevo contexto de reformas fiscales.

Por su parte, José Andrés Velis, con más de tres décadas de experiencia en la Dirección General de Aduanas (DGA), será el encargado de modernizar y mejorar el control del comercio exterior. Velis ha sido una figura clave en la implementación de sistemas tecnológicos en la Aduana, destacando su trabajo con el Sistema Malvina, antes conocido como Sistema María, que permitió mejorar la trazabilidad de las mercaderías y optimizar las operaciones aduaneras. A lo largo de su carrera, también ha liderado proyectos de gran relevancia, como la implementación de escáneres en terminales portuarias y el uso de drones en la vigilancia de operaciones portuarias.

Una estructura más simple y con menos costos

La creación de ARCA no solo trae cambios de liderazgo, sino también una profunda modificación en la estructura administrativa. Según fuentes oficiales, la nueva agencia tendrá una organización más simplificada, con una reducción del 45% en los cargos superiores y del 31% en los niveles inferiores, lo que implicará un ahorro significativo para el Estado. En total, se estima que unos 3.100 empleados, contratados durante el último gobierno kirchnerista, serán reubicados o pasarán a disponibilidad. El impacto de estos cambios representará un ahorro presupuestario de $6.400 millones anuales.

En cuanto a los salarios de los nuevos directores, el gobierno ha anunciado que serán equiparados a los de ministros y secretarios de Estado, lo que implica una significativa reducción de sueldos. Actualmente, la titular de la AFIP percibe alrededor de $32 millones, pero bajo la nueva estructura, su remuneración se ajustará a $4 millones, similar al sueldo de un ministro. Asimismo, los directores de la DGI y la Aduana verán sus salarios reducidos de $17 millones a $4 millones, en línea con los sueldos de un secretario de Estado.

Una reestructuración necesaria

Con estos cambios, el gobierno de Milei busca dejar atrás lo que considera una "voracidad fiscal" que afectaba a los contribuyentes. El objetivo de ARCA será mejorar la transparencia y eficacia en la recaudación y control aduanero, garantizando un sistema más eficiente. Según el vocero del gobierno, Manuel Adorni, estas reformas se enmarcan en el principio liberal anunciado por el presidente en su asunción, basado en el respeto a la propiedad privada y la libertad de los ciudadanos.

Esta no es la primera medida de ajuste en la AFIP. En julio, el Decreto 559 ya había reestructurado parte de la organización, eliminando subdirecciones y centralizando funciones. Ahora, con la creación de ARCA, el gobierno busca avanzar hacia una gestión más moderna y ajustada a las demandas actuales del sistema tributario y aduanero, asegurando una mayor recaudación y mejor control de las fronteras.